EL NARCO PATRIOTISMO DE SHEINBAUM

EL NARCO PATRIOTISMO DE SHEINBAUM

Por

Mario Góngora Hernández

Obviamente el narco patriotismo que nos demanda la Presidente,  no es solamente morir por la patria en defensa de los narcos, contra los “invasores” norteamericanos. Tampoco nada tiene que ver con gritar a favor del equipo mexicano de fútbol, ni mucho menos salir ondeando banderas después de algún triunfo de dicho equipo. Tiene que ver más bien con  traicionar a delincuentes, así como la Presidente llamó “Traidor a la Patria” a uno de los Chapitos por entregar al Mayo Zambada a las autoridades norteamericanas.

El peligro actual para la nación no viene del exterior, ni de si hay o no, agentes extranjeros participando en la recopilación de inteligencia sobre nuestro país; viene precisamente de aquellos obradoristas que viendo sus ilícitos amenazados, claman porque no intervenga nadie, y todo siga igual.

De hecho, si hemos de ser destruidos como sociedad y como país, la destrucción no vendrá del extranjero, desafortunadamente la haremos nosotros mismos a través de la Presidente. Nos estamos convirtiendo en un pueblo donde un buen número de ciudadanos han perdido su honor, o esa cualidad moral de la persona que actúa de acuerdo con las normas establecidas, “de forma justa y diciendo la verdad”.

Un buen número de aquellos que pugnan por dejar al ejército en las calles tienen intereses personales de que esto suceda así, además de promover la discordia entre la gente. Sí, es cierto,  abusan de muchos ciudadanos siendo la guardia nacional la que impunemente dispara a cualquier ciudadano…y se pondrá peor, o como dicen los chairos, “pior”.

La falta de respeto por la vida, por la propiedad y por los derechos más elementales, así como el imperio de las pasiones, efectivamente pueden hacernos temer por el futuro de la patria, y obviamente por el nuestro también. 

Ser patriotas honorables, lo dije alguna vez, quiere decir tener menos flojera, menos apatía, menos envidia, menos codicia, menos vicios, menos mala fe y menos mentalidad política; y más amor al trabajo, mas conciencia de nuestras obligaciones, más disciplina y sobre todo, más lealtad al país dejando a un lado toda aquella actividad que lo perjudique.

Si no cambiamos la presente situación, la cual no se dará con una individua disfrazada de Mujer  Maravilla, podemos esperar una dictadura directamente controlada por el hampa por lo que el llamado es para efectivamente denunciar hasta al vecino si es necesario, si es que pertenece al bajo mundo. Seguramente no nos harán mucho caso, como ha sido costumbre, pero debemos entonces denunciar públicamente la falta de acción por parte de las autoridades. Recordemos que en el mundo siempre han existido los delincuentes que jamás piensan en el futuro de su patria; mientras éstos hagan y deshagan a su antojo, no habrá paz.

“Honor es un valor humano que dignifica al hombre, que construye sociedades más justas y desarrolladas para un bien común, es una virtud que enaltece la conciencia y la conducta, hace temblar a la indiferencia por la fuerza del compromiso, es quien opaca a la inequidad y doblega a la injusticia” (M. Félix)